Mons. Nicolás Castellanos Franco, OSA

Nacido el 18 de febrero de 1935 en Mansilla del Páramo, provincia de León.

Ingresó aún adolescente en la Orden de San Agustín y realizó sus primeros votos en Palencia el 10 de septiembre de 1953; tras realizar sus estudios eclesiásticos en el monasterio burgalés de Santa María de la Vid, fue ordenado sacerdote el 12 de julio de 1959. En 1973 fue elegido provincial de los agustinos. Cuando disfrutaba de su segundo mandato como provincial, le llegó en julio de 1978 el nombramiento de obispo de Palencia, recibiendo la ordenación episcopal el 30 de septiembre del mismo año, de manos del nuncio apostólico Luigi Dadaglio.

El 27 de julio de 1978 fue nombrado Obispo de Palencia y el 30 de septiembre recibió la Ordenación Episcopal en la Catedral de Palencia. Acto seguido tomó posesión de la Diócesis.

En la CEE fue miembro de la Comisión Episcopal de Seminarios y Universidades (1981-1990) y de la Comisión Episcopal de Pastoral (1984-1987). También perteneció a la Comisión Episcopal de Límites de 1987 hasta 1991.

En 1991 presentó su renuncia como obispo, que le fue concedida el 4 de septiembre por Juan Pablo II. Marchó entonces como misionero a Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, llevando consigo un nutrido grupo de laicos y de sacerdotes. Con ellos inició el “Proyecto Hombres Nuevos”, para tratar de mejorar las condiciones de vida en los barrios más desfavorecidos de aquella ciudad boliviana. A lo largo de los años ha ido poniendo en marcha diversos proyectos para atender a mujeres y a la población infantil: comedores, centros escolares, viviendas sociales y hospitales.

Por su labor ha recibido diversos premios en España y en Bolivia, siendo el más prestigioso de ellos el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia, que le otorgaron en 1998 junto con Vicente Ferrer, Joaquín Sanz Gadea y Muhammad Yunus.

En 1998 le fue otorgada la Medalla al Mérito Municipal por el Concejo Municipal de Santa Cruz de la Sierra; en 1999 es designado "Leonés del año"; ese mismo año le es otorgado el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia, por "su trabajo abnegado y tenaz y su contribución ejemplar en áreas geográficas y en actividades distintas". En 2001 la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes le otorga el Premio a la labor humanitaria a favor de los niños pobres; en 2002 la Comunidad de Castilla y León le concede el Premio Valores Humanos. En 2006 el Gobierno español de Rodríguez Zapatero le otorga la Medalla de Oro al Trabajo, que le es impuesta en agosto del mismo año por la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega en el curso de una visita de estado por Bolivia.