Sexto Domingo de Pascua: SENTIRSE AMADOS

Descargar – En este Sexto Domingo de Pascua, el itinerario “Abrazos y Ritmos de Vida” nos invita a vivir la experiencia de SENTIRNOS AMADOS

 

REFUGIO. Álvaro Fraile

 

Hasta aquí hemos llegado
dame la mano es un paraíso
descálzate, estás cansado...
mira parece que hay un sitio

y ya has andado suficiente
deja que ahora empuje el aire
rompe con todo sé valiente
ven cerca que pueda abrazarte

que yo estaré contigo siempre
yo estaré contigo siempre...

no tengas miedo, duele el alma
pero vendrá un tiempo nuevo
otra bandera, otra esperanza
tan sólo hay que encontrar el hueco

y que se cuele tu mirada
en los que pintan todo negro
tú eres la voz de los que no hablan
porque alguien los cubrió de miedo

y yo estaré contigo siempre

que yo iré contigo siempre...

mi palabra será tu refugio
no eches de menos tu casa
ve con lo puesto, ve desnudo
tuyo es el aire y el agua

aquí refugio, aquí sobra sitio
abrigo, calor y silencio
no pasaremos nunca más frío
no pasaremos más miedo...

 

Evangelio: Juan 14,15-21

 

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: Si me amáis obedeceréis mis mandamientos, yo rogaré al Padre para que os envíe otro Paráclito, para que esté siempre con vosotros.

Es el espíritu de la verdad que no puede recibir el mundo porque ni lo ve ni lo conoce; vosotros en cambio, lo conocéis porque vive en vosotros y está en vosotros. No os dejaré desamparados, volveré a estar con vosotros.

El mundo dejará de verme dentro de poco; vosotros en cambio seguiréis viéndome, porque yo vivo y vosotros también viviréis.

Cuando llegue ese momento, comprenderéis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí y yo en vosotros. (...)

 

 

Frecuentemente decimos que la esperanza es lo último que se pierde, sin darnos cuenta estamos poniendo en valor la importancia decisiva de esta virtud. Sin esperanza todo se desmorona, se nubla el horizonte, no es posible la motivación.

Hemos escuchado en la Palabra como tenemos que “estar siempre dispuestos a dar razón de nuestra esperanza”, es decir, manifestar con soltura cuánto nos motiva la relación con Dios.

Amigos, que importante es la espiritualidad en el ser humano; es esencial para asumir y gozar el misterio de nuestra existencia, así como para encarar las dificultades y los sobresaltos de la vida.

Toda nuestra espiritualidad queda fortalecida con el Espíritu de la verdad, el gran regalo que nos deja Jesús. Este Espíritu es presencia, vive con nosotros y está con nosotros y nos estimula a vivir los valores que nos elevan y nos hacen vivir dignamente. Con Él descubrimos en profundidad la razón del Evangelio, aporta aíre nuevo a nuestra vida.

 

 

Reflexión. Santa Teresa Benedicta de la Cruz

 

Cuando, el domingo, 2 de agosto de 1942, sonó el llamador de la puerta del Carmelo de Echt, en Holanda, toda la comunidad sabía lo que iba a ocurrir: La hermana portera abrió la puerta: dos agentes de la Gestapo reclamaban la presencia de las dos hermanas Stein Courant: Edith y Rosa; la priora las llama, Edith sale inmediatamente y entra de nuevo un ínstate en la iglesia para pedir: "Recen, hermanas, por nosotras. Ya en la calle le dice a su hermana Rosa: "Ven, marchemos por nuestro pueblo".

Arranca el grande y siniestro coche negro con las dos carmelitas dentro. Así fueron engullidas en el torbellino de odio y de barbarie. Un viaje hasta la frontera con Alemania en el campo de Westerbork.

Allí, permanecen unos días bajo un sol abrasador y es ahí donde se recogen los testimonios: Un testigo afirma de Edith: “Su compostura y serenidad nos transmitían paz en medio de la desesperación, su mirada nos hacía sentirnos amados. Ella se ha fijado en unos religiosos detenidos como ellas ese domingo; los reúne, rezan, esperan, les invita a amar a todos. Edith cuida de los niños y adolescentes desesperados ante la apatía de sus madres, vencidas por tanto sufrimiento y al borde de la locura”. Otro testigo dirá: “Cada vez que pienso en ella sentada en el campamento vine a mi mente la misma escena: La Piedad sin Cristo, nos sentíamos amados y abrazos en su ternura”.

El día 7 al amanecer salen los trenes hacia Auschwitz, ha llegado su hora. Ella, calla, ama, ora y se ofrece en la más absoluta desnudez, incluso física. Se sembró como grano de trigo... mil veces multiplicado, y el fruto es el AMOR. Hoy intercede por la veja y desgastada Europa. Un faro en medio de la tempestad.

 

 

Oración

 

Abre nuestro corazón, Jesús, a tu Espíritu.

Donde está el Espíritu,
no hay soledad ni aburrimiento.

Donde está el Espíritu,
la vida y la alegría se ensanchan.

Donde está el Espíritu,
la valentía y la humildad se alían.

Donde está el Espíritu,
crecen la justicia y la paz.

Donde está el Espíritu,
sentimos tu presencia amorosa.

Donde está el Espíritu,
la fe mueve montañas.

Donde está el Espíritu,
la esperanza vence a la muerte.

Donde está el Espíritu,
el amor es capaz de dar la vida.

Abre nuestro corazón, Jesús, a tu Espíritu.