La obra Los desposorios místicos de Santa Catalina, de Mateo Cerezo, propiedad de la Catedral de Palencia, participa en la exposición titulada “Mateo Cerezo el joven (1637-1666): materia y espíritu” que se puede admirar en la Catedral de Burgos hasta el próximo 2 de noviembre.
Esta exposición forma parte de una amplia programación de actividades culturales y sociales programadas por la Fundación VIII Centenario de la Catedral de Burgos para conmemorar el octavo centenario de la colocación de la primera piedra del templo catedralicio y cuenta con el patrocinio de la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León.
Es la primera muestra sobre la figura de este pintor barroco burgalés que falleció con solo 29 años. Está compuesta por 26 obras, cuatro estampas y 22 lienzos, que proceden de instituciones como el Museo de San Telmo (San Sebastián), los museos de Burgos y Guadalajara, Calcografía Nacional, la catedral de Palencia o la Diputación de Segovia, además de colecciones particulares de Madrid, Barcelona o Murcia.
La pintura prestada por la catedral de Palencia para dicha exposición es de gran formato, 260 x 225 cm., y fue realizada en 1661 por Mateo Cerezo, discípulo de Juan Carreño de Miranda. Habitualmente se encuentra ubicada en la sala capitular de la seo palentina, y es réplica del cuadro de igual título, realizado un año antes y firmado por el autor, propiedad del Museo del Prado. Existe una tercera réplica, hecha por el propio autor, que se conserva en el Museo de Burgos.