Queridos lectores, paz y bien.
Destacábamos la semana pasada el hecho de que Palencia lucha por ser una ciudad con valores. La respuesta popular al Jubileo de la Discapacidad ha puesto de relieve una ciudadanía y un tejido cristiano notables. Hoy es mi intención, de la mano de la Asociación REDMADRE, iluminar un aspecto de la realidad social que requiere conciencia y compromiso.
Dice la ley que regula los motivos para establecer la Red Integral de Apoyo a la Mujer Embarazada de Castilla y León: “Son muchas las ocasiones en que la mujer ha de enfrentarse a un embarazo en circunstancias adversas para ella y su entorno más cercano, como la falta de una relación familiar estable, minoría de edad, inestabilidad laboral o carencia de recursos económicos y en las que la ausencia de información suficiente y del apoyo necesario conducen a que el aborto sea la única alternativa que la misma contempla para resolver la situación”.
Nuestra sociedad occidental envejece, y en lugar de privilegiar la institución familiar, ésta es a menudo atacada por motivos ideológicos. Una natalidad que se desploma es un indicativo de una crisis social y moral aguda, donde maternidad y paternidad son presentadas como obstáculos al desarrollo personal o manifestaciones de un esquema superado. Y este no es el mejor ambiente para que la mujer embarazada y con niños menores de dos años se sienta apoyada para continuar con su embarazo.
Los problemas que concurren para ella son: soledad, inestabilidad laboral, escasez de recursos económicos, embarazo con minoría de edad, violencia contra ella, falta de una red adecuada de apoyo familiar y social, o el hecho de ser mujer inmigrante con menores. En 2024 REDMADRE Palencia atendió a 118 mujeres embarazadas y madres vulnerables, de las que 87 participaron en el programa de atención, y 31 recibieron ayudas puntuales. Recibió 402 llamadas que fueron atendidas mediante información, orientación y derivación hacia recursos o entidades. Un total de 539 personas han participado en el programa de Atención a Madres Embarazadas con dificultades y Sensibilización social.
Las mujeres voluntarias que impulsan esta red tan vital, tan maravillosa como necesaria, conocen de primera mano situaciones de injusticia impropias de una sociedad que se considera avanzada o desarrollada. Si la semana pasada nos referíamos a la necesidad de derribar las barreras que se levantan en torno a las personas con discapacidad, hoy toca volver la mirada ante las mujeres que, en precariedad aguda, han de enfrentar el alumbramiento de una nueva vida humana. Su situación hace de estas mujeres, en su mayoría extranjeras, mano de obra barata y susceptible de explotación. El abuso laboral se cierne sobre ellas e incluso está a la orden del día para algunas en nuestra Palencia del 2025. Los alquileres abusivos completan un cuadro muy preocupante.
En efecto, no es de recibo que haya trabajo irregular, en el que se llega a pagar 5, incluso 3 € la hora. O servicios relacionados con hostelería, que paguen 20 € por labores realizadas en tres días del fin de semana. O que los niños de la cuidadora de los niños de la casa no puedan compartir comida con ellos. La talla y la envergadura moral de una sociedad se mide desde abajo. Como católicos, la respuesta es cumplir la DSI, la doctrina social de la Iglesia, esa que inició en los tiempos modernos León XIII y que ahora va a continuar impulsando León XIV.
«Tuve hambre y me disteis de comer, estaba desnudo y me vestisteis...». No se trata de un mandato moral, sino de una constatación. Jesús de Nazaret, el Salvador el Hijo, habita en estos los más pequeños. Son ellos los que nos juzgan, los que tasan nuestra calidad humana y cristiana. “Nunca estarás sola”, es el lema de Redmadre, pero ojalá que se convierta en una inspiración para nuestra conciencia y nuestra conducta. Palencia sin barreras, Palencia de todos y para todos.
Hoy celebramos la fiesta de la Ascensión del Señor, y su subida hasta el Padre nos puede dejar atónitos y perplejos. También hoy nos viene bien escuchar lo que los dos hombres vestidos de blanco dijeron a los apóstoles: «Galileos, ¿qué hacéis ahí plantados mirando al cielo? El mismo Jesús que ha sido tomado de entre vosotros y llevado al cielo, volverá como lo habéis visto marcharse al cielo». Como sucesor de los apóstoles, me toca recordaros esto, que ese Jesús camina en la historia, en los pequeños, en los últimos. Que ninguna hermana nuestra quede sola y desamparada. Gracias a las voluntarias de Redmadre, el Evangelio va saliendo adelante entre nosotros.
+ Mons. Mikel Garciandía Goñi
Obispo de Palencia